Un espacio para estar, un tiempo para compartir.
Dar y recibir. Recibir y dar. Un espiral que crece y enriquece la vida de las personas y de las instituciones.
¿Cómo describir los sutiles modos en los que se producen estos procesos?
Una oferta solidaria, la realización de una obra de teatro a beneficio. Una actividad para recaudar fondos para la Cooperadora de la escuela, la promoción de esta actividad cultural. Nada especial, aún cuando lo solidario siempre tiene algo de grandioso.
Las diferencias están en los sentidos con los que abrazamos las acciones. Los sentidos con fuerza de colectivo con los que humedecemos la realidad, tratando de quitarle sequedad y aspereza.
Una obra y una actriz. Una actriz, una ex – alumna, una ex – alumna y una escuela. Después de 6 años de egreso Lucía sigue anudada al CEBAS.
El CEBAS cada año teje la trama, tensa las hebras que se aflojan, incorpora nuevos hilos para extender el tejido.
La red existe, aunque la tanza es transparente y no se ve. La red se mueve e impone nuevos desafíos que son solo oportunidades.
Promover la actividad, una obra de teatro en este caso, es estimular y recrear relaciones. Cada llamado que promociona en realidad busca a alguien, convoca. Anuncia la necesidad del otro, reconstruye el sentido de pertenencia. Reinstala la afiliación con el CEBAS y con el grupo. Una sucesión de “vamos juntos”, “nos vemos allá”, “nos encontramos”, “yo no puedo pero registro y difundo” valen mucho más que cinco pesos.
La riqueza esencial se cosecha. Y aquí en el CEBAS andamos labrando caminos, esos senderos que encontramos entre la diversidad de los que somos. Todos los caminos nos conducen a aprender cosas nuevas.
La red genera, sostiene y entrega en intercambio.
El CEBAS ofrece sus propias redes, redes que siempre son posibilidades.
Un grupo de teatro independiente llega a la ciudad. Conquista una sala importante, completa las localidades y recibe un nutrido público.
De tanto enredarnos a veces perdemos punta del ovillo.
Nos ayudan a encontrarla y a definir ¿quién empezó primero?
Verónica Bonelli
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